Add parallel Print Page Options

En realidad, nos sentíamos como los condenados a muerte. Pero eso nos ayudó a confiar en Dios, que puede hacer que los muertos vuelvan a la vida, y no a confiar en nosotros mismos. 10 Dios nos protegió de grandes peligros de muerte, y confiamos en que él nos seguirá cuidando y protegiendo. 11 Por favor, ayúdennos orando por nosotros. Si muchos oran, muchos también serán los que den gracias a Dios por su ayuda, y por todo lo bueno que él nos da.

Read full chapter